viernes, 9 de mayo de 2014

Invadiendo la privacidad como BUENOS VECINOS

Aunque el termino y la cultura de las fraternidades es algo muy de la cultura norteamericana, en el resto del mundo hemos adoptado ciertas reglas o tradiciones de las mismas como parte del legado de la cultura pop gringa al resto del mundo, básicamente via películas (tanto de cinematografía comercial como del sub genero porno). Así, es común encontrar en varias universidades las famosas bienvenidas o fiestas de despedida, las iniciaciones a los alumnos de primer ingreso, etc.

Haciendo un poco de historia, las fraternidades, cuyo nombre data de algún código griego, se originan por la necesidad de tener un lugar donde los estudiantes se albergaran durante su estancia en la universidad, ya que la mayoría de las veces, los alumnos deberán mudarse a alguna otra region a la que residen para asistir a la universidad que los ha aceptado.

A lo largo de la cinematografía hemos visto varias cintas, en su mayoría del genero comedia, que buscan explotar esta faceta de cualquier joven, la búsqueda de su identidad al enfrentarse a una las decisiones mas grandes de su vida, su futuro, la carrera que definirá su vida profesional del resto de su vida y que de alguna manera pone fin al joven irresponsable para definir al hombre responsable y profesionista que formara ahora parte de la sociedad productiva de cualquier país.

Durante esta transición, es que suceden toda clase de actos, momentos que parecieran gritos de desesperación para disfrutar los últimos minutos que justifiquen la ridiculez o inmadurez de dichos actos. Así, estos jóvenes son causantes de las mas grandes fiestas, donde el mayor objetivo es causar el mayor desastre, que exponga el instinto humano por actuar rompiendo cualquier regla, abusando de cuanta sustancia tóxica posible, buscando tener cuanto sexo sea posible dictado por el alto nivel hormonal de cualquier adolescente, y demás actividades que delimitan el joven que esta por caducar para dar vida al nuevo hombre dictado por las normas sociales.

Sin embargo, son pocas películas las que han logrado este cometido, cayendo en bromas igual de estúpidas que los mismos actos que los generan o que no presentan mayor novedad como espectador, o tratando de aventurarse en esa ruptura de inocencia para dar paso a una madurez mediante el cliche y sentimentalismo que solo causan mayor pena que risa. "Buenos Vecinos" (2014), es una grata excepción a la regla, ya que a pesar de estar cargada de bromas pesadas y con todos los elementos que hemos mencionado y caracterizan este submundo  esta mas enfocado en mostrar esa faceta que los personajes están enfrentando y de cierta manera se sienten frescas y actuales para una nueva generación como para aquellos que ya hemos dejado eso tiempo atrás.

Ese es el mayor acierto de la cinta, ya que mediante la vision de una joven pareja que se estrena como padres de familia, enfrenta ese choque al ver que los nuevos vecinos de a lado son una fraternidad lo que pondrá su cómoda nueva vida adulta en juicio. Cuando las fiestas empiezan, de igual manera se desata una guerra para lograr hechar a los vecinos fuera del vecindario. Sin embargo en este intento, probaran las mieles de esa juventud, al inmiscuirse en sus fiestas y recordar lo que han dejado atrás, la diversion, la fiesta, la música, sin presiones ni obligaciones, desgraciadamente para ellos eso es ahora solo una fantasia o efecto pasajero pues al otro día deberán volver a su rutina, que implica horas de trabajo de oficina,  cuidar al bebe, pocas horas de dormir, etc.

Mientras vemos esta lucha de vecinos, ambos tratando de ser los mejore vecinos a ojos externos, vemos la verdadera lucha interna de ambas perspectivas: la de los jóvenes buscando dejar un legado en esta comunidad para salir a enfrentar ese mundo laboral adulto y deje atrás la fiesta y libertad del estudiante. Y la de los adultos, que sumergidos en un matrimonio, paternidad, deudas, obligaciones, expectativas, tienen tanto peso sobre sus hombros que se han olvidado de que aun con ello pueden divertirse y pasar un buen rato pues la fiesta aun no ha terminado para ellos, simplemente se ha modificado.

Cuando jóvenes, cuantas veces no anhelábamos crecer y empezar a trabajar para poder ser independientes y respetados y ahora como adultos cuantas veces no recordamos aquellos días de gloria donde podíamos quedarnos en cama todo el día sin tener nada que hacer y ahora solo suena como una fantasia? Crecer pesa y cada etapa de la vida es distinta mas única por lo que solo nos queda disfrutarla al máximo mientras dure y empezar el proceso una vez mas, sin perder la oportunidad de disfrutar y divertirnos sin importar la edad y cuantas responsabilidades haya pues siempre podremos ser jóvenes de corazón o al menos organizar una fiesta épica, como la de aquellos tiempos.


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